Una máquina llenadora de bebidas de gran capacidad está diseñada para maximizar el rendimiento, atendiendo las necesidades de instalaciones de producción de alto volumen, como embotelladores nacionales importantes de agua, refrescos carbonatados (CSD) o cerveza, donde la economía de escala es fundamental. Estas máquinas son casi exclusivamente de diseño rotativo, con un gran carrusel que aloja decenas de válvulas de llenado (a menudo 80, 100 o más) que operan simultáneamente. A medida que las botellas se transportan a la plataforma giratoria, son elevadas hacia las válvulas de llenado, donde se lleva a cabo un proceso preciso de llenado, ya sea por isobárica (presión) para bebidas carbonatadas, evitando la desgasificación, o por gravedad para productos sin gas. La velocidad y precisión de estas máquinas son asombrosas, con capacidades que a menudo superan las 40.000 botellas por hora, manteniendo una exactitud en el nivel de llenado dentro de ±1,5 mm. Para lograrlo, incorporan tecnología avanzada de servomotores para un control suave del movimiento, sistemas sofisticados de PLC para monitorear cada parámetro (desde niveles de CO2 hasta presión del depósito) y están construidas con componentes robustos para garantizar fiabilidad operativa las 24 horas del día, los 7 días de la semana, con tiempos de inactividad mínimos. Para una empresa multinacional que lanza una nueva bebida energética, la implementación de esta máquina es esencial para satisfacer la demanda esperada en el mercado. La capacidad de fabricación de Ace-Filling incluye estas soluciones a escala industrial, diseñadas con modularidad para futuras ampliaciones y construidas según los más altos estándares de durabilidad e higiene, convirtiéndolas en un pilar fundamental de la fabricación moderna de bebidas a gran escala.